" Malditos estereotipos "
Me enfrentaré a los estereotipos desde mi opinión personal.
Los estereotipos, esa "realidad" nada objetiva sobre ideas preconcebidas que nos influyen a nivel de "creencias" sociales y cómo no, personales.
Los hay de todo tipo, para cualquier situación que convenga, podemos encontrar relacionados con el género, con cánones de belleza, asociados al trabajo, asociados a clases sociales, a tendencias , a orientaciones e identidades sexuales, asociados con la edad, con diferentes culturas, con diferentes razas, con el estado civil, ...... mmmm, vamos! un sinfín de palabrería que va pasando de generación en generación como herencia, pero sin ninguna realidad científica de base.
Tomemos por ejemplo los "cánones de belleza". Lo bello es lo que se ve por fuera, esa bonita frase de "una imagen vale más que mil palabras", la delgadez, la altura, el color de ojos, el color del pelo, la estética de la ropa, el estilo, ir a la moda....¿dónde quedó aquello de que el valor y la belleza está en el interior de las personas?.....Nos lleva encontrarnos con unos adolescentes rodeados de problemática asociada a su imagen, y son vulnerables, pero en el mejor de los casos puede que consigan librarse de padecer trastornos alimentarios graves (anorexia, bulimia...) y mantener una autoestima y un autoconcepto llevaderos.
Asociados a las diferencias de género; perjudican gravemente nuestra sociedad, coartan las libertades de las personas ( sean hombres o mujeres), y no facilitan una evolución equilibrada para nuestr@s hij@s.
Asociados a diferencias culturares, raciales,...claro está, favorecen de nuevo la discriminación, la violencia, desfavorecen las relaciones humanas sanas, tampoco dejan que avancemos hacia una sociedad integrada, en sano equilibrio.
El eje común de todos y cada uno de los estereotipos podría ser fácilmente la discriminación como consecuencia.
¿Qué nos aportan los estereotipos? los prejuicios y algún que otro refranillo puñetero (los hay incitadores al sexismo, al machismo y a la violencia)....Nos impiden valorar libremente a las personas por lo que realmente son, nos limitan mentalmente y no nos dejan experimentar la realidad de los demás abiertamente.
Desde mi punto de vista, , mejor ni reciclarlos, mejor cuestionarlos y romperlos todos.